Las judías verdes con carne son una receta clásica y reconfortante que nos transporta a los sabores tradicionales de la cocina casera. En este plato, las judías verdes frescas se combinan con tiernos trozos de carne y un sofrito lleno de aromas, logrando un equilibrio perfecto entre textura y sabor. Es una opción ideal para quienes buscan una comida nutritiva y completa, ya que no solo es sabrosa, sino también rica en proteínas y vegetales. Además, su versatilidad permite adaptarla a diferentes gustos y ocasiones, convirtiéndola en un plato que toda la familia disfrutará.
Tabla de contenido
judías verdes (Ejote) con carne
son un plato tradicional y reconfortante, donde las judías verdes se cocinan junto con trozos de carne tierna y especias, creando una combinación sabrosa y nutritiva. Es ideal para una comida completa y equilibrada.
Ingredientes:
- 500 g de judías verdes frescas
- 300 g de carne de ternera o cerdo (puedes elegir la que prefieras)
- 1 cebolla grande, picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 2 tomates maduros, rallados o 200 g de tomate triturado
- 1 zanahoria, cortada en rodajas
- 1 pimiento verde, cortado en tiras
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Sal y pimienta al gusto
- 1 hoja de laurel
- 1 vaso de caldo de carne o agua
Preparación:
- Preparar las judías verdes:
- Lava bien las judías verdes y corta los extremos.
- Si las judías son muy largas, córtalas por la mitad para facilitar su cocción.
- Cocinar la carne:
- En una cazuela grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio.
- Añade la cebolla y el ajo picados, y sofríe hasta que estén dorados.
- Incorpora la carne cortada en trozos pequeños. Cocina hasta que la carne esté bien dorada por todos lados.
- Añadir las verduras:
- Agrega la zanahoria, el pimiento y las judías verdes a la cazuela. Remueve bien para que las verduras se mezclen con los sabores del sofrito.
- Añade el tomate rallado o triturado, el pimentón dulce, la hoja de laurel, sal y pimienta. Cocina todo junto durante unos minutos.
- Cocción final:
- Vierte el caldo de carne o agua, y mezcla bien. Cubre la cazuela y deja que todo se cocine a fuego lento durante unos 30-40 minutos, o hasta que la carne esté tierna y las judías estén bien cocidas.
- Si ves que el líquido se evapora demasiado, puedes añadir un poco más de caldo o agua.
- Servir:
- Una vez que la carne esté tierna y las judías estén suaves, retira la cazuela del fuego.
- Sirve el plato caliente, acompañado de arroz o patatas si lo deseas.
Preguntas Frecuentes (FAQ)
1. ¿Puedo usar cualquier tipo de carne en esta receta de judías verdes?
Sí, puedes sustituir la carne de ternera o cerdo por carne de pollo, cordero, o incluso una opción vegana como tofu o seitán, ajustando el tiempo de cocción según el tipo de proteína que elijas.
2. ¿Es posible hacer esta receta con judías verdes congeladas?
Sí, puedes usar judías verdes congeladas si no puedes conseguir judías frescas. Simplemente añádelas directamente a la cazuela durante el paso donde se incorporan las verduras, sin necesidad de descongelarlas previamente.
3. ¿Puedo hacer esta receta sin tomate?
Sí, si prefieres evitar el tomate, puedes omitirlo o sustituirlo por un poco de pimiento rojo para dar sabor y color al plato.
4. ¿Cómo puedo hacer la receta más ligera?
Para hacerla más ligera, puedes utilizar menos aceite de oliva o sustituir la carne por una versión magra, como pechuga de pollo o pavo. También puedes optar por cocinar al vapor las verduras antes de mezclarlas con la carne.
5. ¿Cuánto tiempo dura este plato en la nevera?
Guardado en un recipiente hermético, este plato puede durar de 3 a 4 días en la nevera. También es posible congelarlo para disfrutarlo más adelante.
6. ¿Puedo usar caldo vegetal en lugar de caldo de carne?
Sí, si prefieres una versión más ligera o vegetariana del plato, puedes utilizar caldo de verduras en lugar de caldo de carne. El sabor será un poco diferente, pero igual de rico.
Conclusión
Las judías verdes con carne son una receta tradicional que combina lo mejor de las verduras frescas y la carne, creando un plato lleno de sabor, nutrientes y calidez. Su preparación es sencilla y permite variaciones según los ingredientes que tengas a mano o tus preferencias. Es una excelente opción para una comida completa y reconfortante, que se puede disfrutar en familia y en cualquier época del año. Además, es versátil, permitiendo adaptaciones para diferentes dietas y gustos. ¡Un plato que nunca falla!